Colombia estrena nuevo presidente y nueva dirección política: los signos que han surgido han sido significativos.
Chaves se presentó en Santa Marta y reunidos durante cuatro horas decidieron crear comisiones de trabajo para limar los desacuerdos entre ambos países.
Santos ha actuado con inteligencia, los problemas cuanto antes se encaren mejor, su frontera con Venezuela es muy extensa,no solo es territorial, también es económica y los comerciantes colombianos habían perdido el 71% de su comercio con el país bolivariano.La deuda con los importadores venezolanos es alta por la presión de la política cambiaria venezolana.
Chaves tiene dos graves problemas: Venezuela está cercana a la hiperinflación y entra en elecciones legislativas en septiembre. La alta inflación socava la economía familiar y empresarial porque se come los ahorros, se come el valor del trabajo, se come el valor de los activos, no hay confianza, su popularidad está bajando incluso entre sus más fieles seguidores por las falencias en la gestión económica de la distribución alimentaria y la entrada de los asesores cubanos en círculos de poder militares y políticos. Para conseguir unir a su electorado creó un nuevo problema exterior, el enemigo yanqui pero no era suficiente, y entonces utilizó Colombia.
Santos necesita despejar un problema y centrarse en la reconstrucción económica y social, incluida, con prioridad, la lucha con la narcoguerrilla, que está pidiendo dialogo. Despejar un frente o mejor lograr una tregua en la guerra, con el vecino, elimina tensiones, ayuda a centrar los problemas y a reorganizarse para afrontar la presidencia.
El problema, puede ser, que Chaves venda ésta visita como el inicio de una gran amistad y cada domingo se presente en el jardín colombiano con todas las herramientas para organizar el asado dominical. Santos deberá administrar bien esa "amistad" y la locura que subyace y con la que sueña el venezolano que se llama "sueño bolivariano" de unir ambos países.
Por otra parte, Uribe ha pataleado hasta el día anterior a la entrega del poder ¿De acuerdo con Santos? No lo creo y espero que en los próximos días salten las claves.
Estos próximos tiempos van a ser apasionantes.
miércoles, agosto 11, 2010
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